sábado, 9 de febrero de 2008

De las 00:04 a las 5 AM. Primera parte. El Poder de la Verga.

Pensé de aquella ves cuando fui con los Fabela, el pasado lunes. Antes de ir estuve un tiempo echándome unas cheves en la casa para hacer tiempo esperando una lana y en el jardín empecé a meditar algo del pasado. Ya despierto se me vinieron algunas cosas a la mente de aquellos pensamientos.

De los pendientes en el jale --no tanto los que se refieren al trabajo, sino a lo que se refiere a las relaciones de las personas con las que no necesariamente trabajo—y otras cosas, se me vino a la mente de que paso con aquella amiga que tuve.

Se llamaba Magda, la relación era muy amplia entre los dos que todos los días hablábamos. Fueron varios años así y de repente todo se vino abajo. La pregunta de esa noche fue, ¿que paso realmente?

Ella tenia una amiga, la cual quería conmigo y la rechacé, de echo esa ruca fue relacionada con el Monkeys, pero el siempre lo negó. En fin, ellas eran amigas de la infancia y en algo se pelearon que nunca supe que fue. Un día me llego la amiga esa a la casa con su engendro, no del monkey, sino de un Colombia, aunque quien sabe, nunca le pregunte al Monkey. En fin, llego a la casa y a mi edad era raro recibir a una vieja con un huerco en brazos, bueno, a la fecha ha sido la única que ha llevado un huerco en brazos. Esa vez platicábamos en mi cuarto cuando Magda llamo, se dio cuenta que ella estaba ahí y me colgó. Le llame y me contesto su Papa el cual me pregunto que que había pasado, que por que se había echado a llorar. Yo sacado de onda le dije que su amiga estaba en la casa, y que posiblemente esa hubiese sido la razón. Nunca supe por que lloro. A la vieja con el huerco la despache y ya no la volví a ver.

Pasaron los días y nunca supe la razón del por que se había enojado la Magda. Poco a poco nos distanciamos y volvimos a cotorrearnos mas seguido, hasta que un día desapareció.

Se había hecho novia de un guey el cual tiene un buen de historia que no pienso contar. No tenía ningún problema con el guey, pero al saber el que conocía mas a su vieja que el mismo pues tenía celos. En fin, paso un año y nos volvimos a cotorrear, había terminado con el guey y unos meses mas me clave. No se si fue por que la conocía demasiado o por que había asimilado nunca volverla a ver pero algo me decía que tenia que decírselo. ¿Por que decírselo? Ella siempre usaba las amistades en común para que nunca pasara nada. A escondidas se había juntado otra vez con el novio y desapareció de nuevo.

Pasaron los años y hubo un par de llamadas. Para cuando acorde me llego la noticia que esperaba un niño y que se había casado. Ni a la boda fui invitado. La relación totalmente termino.

Recuerdo que me pregunto que si se llegase a embarazar y si el tipo –O sea cualquier tipo-- no respondía me casase con ella, a lo que le respondí que no estábamos en un rancho para dar apariencias.

Mi psicología me decía que era una ninfomana, en este caso el poder de la verga la había dominado.

1 comentario:

  1. JA! esa si que no me la sabía.., aparte esa Magda no es la que le andaba llorando al Tony en una fiesta? Vieja Loka!

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