Diana fue una amiga a la cual se le perdió el rastro por culpa de una verga. Siempre se me relaciono con ella, pero mi relación con ella era de mera amistad. La apode la Chisquis, ya que estaba chisquiadisima.
De inmensas tetas recuerdo una escena que nos platico el Pepe, su vato en su momento. El guey nos platico que casi en el monte la monto en un tubo sentándola y logrando sacar esos enormes bultos jugueteando con ellos. El cacho al escuchar dicha afirmación se le hizo agua la boca y no daba crédito a lo anterior queriéndose ir lo mas pronto posible al baño para hacerse una paja.
Diana siempre hablaba de su hermano sintiéndose orgullosa ya que estudiaba en el Tec. Experta en chismes me contaba todo inclusive lo que pasaba alrededor de sus vecinos o familiares, desde que su perro se enfermo, hasta que su sobrina perdió el virgo en un accidente de bicicleta.
Después de tanto no verla en una ocasión me platicó de su vato, del cual estaba exageradamente enamorada. Me contaba que los familiares del vato le estaban haciendo brujería a ella para que la relación no perdurara. Vivian en la Cañada Blanca.
De Diana solo extraño su sonrisa y sus orejas, las cuales me encantaba agarrárselas. Por cierto, tengo ese vicio, siempre me han gustado las orejas de las personas, viene desde muy niño estando en brazos, cuando a mi padre se las agarraba.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario